La web es una red de información conectada globalmente, en la que los usuarios acceden a páginas y servicios a través de internet. Funciona gracias a una serie de protocolos y tecnologías que permiten la comunicación entre clientes (como navegadores web) y servidores.
Cliente: Es el dispositivo que los usuarios utilizan para acceder a la web, generalmente mediante navegadores como Chrome o Firefox. El cliente solicita información al servidor y la muestra de manera visual al usuario.
Servidor: Almacena y gestiona la información que se presenta en la web. Cuando un cliente hace una solicitud, el servidor responde enviando los archivos y datos necesarios.
Protocolo HTTP/HTTPS: Es el protocolo de comunicación entre clientes y servidores. HTTP permite transferir información, mientras que HTTPS añade una capa de seguridad mediante encriptación.
DNS (Sistema de Nombres de Dominio): Traduce nombres de dominio (como www.ejemplo.com) en direcciones IP que los servidores comprenden para facilitar la navegación.